Ahora, a sufragar
Como dice el refrán, “agua pasada no nueve molino”. En relación con la crisis económica provocada por el coronavirus, creemos que se han tomado medidas –como la activación de los ERTE, la aprobación de la línea de avales del ICO, las ayudas a los autónomos o las moratorias de declaraciones tributarias y cuotas a la Seguridad Social–, si bien se puede opinar sobre si estas han sido acertadas en tiempo y forma. Pero ahora el tema es otro, hay que mirar hacia adelante y concretar, porque la magnitud del problema lo exige lo queramos o no. Los datos de los que ya disponemos son abundantes, pero, para no perdernos en un mar de cifras, solo reseñaremos algunos de los más significativos: 4 millones de asalariados afectados por ERTE; 1,4 millones de ayudas a autónomos; 900.000 desempleados a causa del coronavirus que reciben prestación… En total, más de 7 millones de personas (el 31% de la población activa) que reciben coberturas del Estado por las medidas establecidas como consecuencia del Covid-19. Si a esta cifra le sumamos los pagos a pensionistas, a trabajadores que ya recibían prestaciones por desempleo y a funcionarios, la cantidad de personas que perciben sus rentas del Estado supera los 20 millones, un número más que respetable.